El Estado de Israel: La democracia más estable de Oriente Medio
Realizado por Natalia Cosío
“Di a mi siervo David: Esto dice el Señor todopoderoso: Yo te saqué del aprisco, de detrás de las ovejas, para que fueras el jefe de mi pueblo, Israel. He estado contigo en todas tus empresas, he exterminado delante de ti a todos tus enemigos; haré que tu nombre sea como el de los grandes de la tierra. Asignaré un territorio a mi pueblo Israel y en él lo plantaré para que habite en él y no vuelva a ser perturbado, ni los malvados continúen oprimiéndolo como antes, en el tiempo en que yo constituí a los jueces sobre mi pueblo Israel; yo le daré paz librándolo de todos sus enemigos. Te hago saber, además, que te daré una dinastía; pues cuando llegues al término de tus días y descanses con tus padres, haré surgir un descendiente tuyo, que saldrá de tus entrañas, y lo confirmaré en el reino. Él me construirá un tempo y yo consolidaré su trono para siempre.” Sm II 7, 8-13
Citar los versículos 8 al 13 del libro de Samuel II de los Profetas perteneciente al Antiguo Testamento de la “Santa Biblia”, o como concierne y como es, el Libro de Shmuel de los Neviim Rishonim de la Tanaj o Biblia Hebrea; podría resultar irónico primeramente por el ateísmo firme de la autora de este mismo ensayo, y segundo porque podrían calificarse igual de poco fiable o de dudosa fiabilidad la utilización de estos libros como fuente. No obstante, quizás sea la Biblia o los libros sagrados unas de las fuentes históricas que más conocimiento ofrecen, de los orígenes inevitables de la cultura y de la historia que sobre ellas se ha ido creando.
El Estado de Israel, יאַרְִשִי תַ ינ ְִד, se nutre de la Historia más profunda, pasando desde el “Bereshit”, el “Shemot”, el Rey David, los “Teré Asar”[1], Sefarad, el movimiento sionista del siglo XIX, el Mandato Británico, la II Guerra Mundial o la Guerra del Yom Kipur. Su sistema político no es más que el fruto recogido de su devenir histórico, de su nacimiento tras la partición que de Palestina hizo la ONU, y los pilares históricotradicionales que nunca apartaron.
Digno de estudio y quizás de alabanza más que de tanta crítica, el Estado de Israel es la única democracia de Oriente Medio. Es el único Estado de la zona en el que los homosexuales gozan de derechos, con el mayor porcentaje de mujeres árabes alfabetizadas de la región (siendo el “Estado Judío”), que tuvo como Primer Ministro a la tercera mujer que obtuvo tal cargo en la Historia (Golda Meir); y en cuyo juego parlamentario están representados partidos políticos árabes que defienden los intereses de ese sector de la población de Israel (tercera fuerza política en las recientes elecciones del 17 de Marzo de 2015). Democracia real con sus elementos, democracia de sistema político estable que se traduce en políticas públicas de gran calidad. ¿Por qué un Estado que puede resultar tan belicoso ad extra es en realidad una fuerte democracia ad intra? ¿Por qué a diferencia de los Estados colindantes de la región que en su mayoría son inestables y no democráticos, Israel se mantiene fuerte y serena a pesar de sus pocos años de vida y su pluriculturalismo? ¿Qué concepción hay del Estado de Israel pero qué verdadero conocimiento se tiene del mismo? Estas mismas preguntas son las que se contestarán en este ensayo. Y estas preguntas ayudarán a fundamentar la siguiente y la redundante hipótesis: “El Estado de Israel: la Democracia más estable de Oriente Medio”.
Israel en Datos.[2]
Capital: Jerusalén (estatus especial)
Población (2014): 8.290.000 habitantes, de los cuales 1.6 millones son árabes de origen Palestino Ø Extensión: 20.770 km2
PIB (2014): 300.000 millones US$ aproximadamente.
Renta per cápita: 35.824 US$
Tasa desempleo: 5,6%
Religión: Judíos (74,9%), musulmanes (17,3%), cristianos (1,98%), drusos (1,7%), otros (4,12%).
Puesto en Ranking de la Corrupción (2014)[3][4] (elaborado por la Organización para la transparencia internacional): 37º4
Puesto en “Doing Business” (2014): 40º5
Índice de Desarrollo Humano (2013): 0,888. Puesto en el ranking: 18º[5]
Encuesta: ¿Qué sabe de Israel?[6]
El controvertido Estado de Israel es quizás controvertido por el escaso conocimiento que hay sobre su sistema político, su historia, su situación ad intra y la “pornomiseria” que estropea su verdadera posición ad extra. Por lo tanto, para reafirmar este argumento y demostrar que en realidad no hay visión alguna más allá que la que puedan transmitir los medios de comunicación o redes sociales en general, y que es poca población la dispuesta a analizar el mismo Estado de Israel antes de “criticarlo” o tener una opinión firme sobre el mismo; realicé la siguiente encuesta con el fin de evaluar generalmente la valoración personal del Estado de Israel con el conocimiento sobre el Estado de Israel y las circunstancias personales del encuestado.
La encuesta titulada “Israel: sistema político, check&balance y accountability, ¿Qué sabe de Israel?” fue realizada con la plataforma surveymonkey.com[7] y fue compartida tanto en las redes sociales (como Facebook o Twitter), y también a allegados/familiares y compañeros de universidad. Por lo tanto, finalmente fueron 64 encuestados (superando los 30 necesarios para obtener algún resultado concreto) de diversa procedencia.
A) Análisis de resultados.
El 57,14% de los encuestados (que representan la mayoría) se encuentran entre los 18-20 años; seguidos de la franja de edad entre los 21 y 29 años (12,70%) y de (curiosamente), los encuestados entre los 40-49 años (12,70%). Un 87,10% provienen de España (una gran mayoría). En cuanto a las creencias religiosas, destaca la casi igualdad de encuestados creyentes y no creyentes, puesto que los creyentes representan a un 50,76% de los encuestados, escogiendo casi el otro 50% las otras opciones (por ejemplo, hay el mismo número de encuestados ateos que agnósticos).
En segundo lugar, es necesario realizar un análisis de las preguntas que valoran subjetivamente el Estado de Israel. La opinión mayoritaria de los encuestados (45%) sobre la conformidad con el Estado de Israel es “NO”, seguido con un 30% de las opiniones de un “No con la situación actual, sí con la creación”, y el “SÍ” rotundo sin variaciones, representa a un 21,67% de los encuestados. Sin embargo, en la siguiente pregunta sobre si al encuestado le gusta o no el Estado de Israel, la opinión mayoritaria (un 35,48%) es “Bastante, no obstante, hay matices a perfilar”, seguida de un 29,03% de encuestados indiferentes, y de un 22,58% a los que le gusta “Poco”.
A la pregunta de si el encuestado considera si el Estado es estable políticamente y seguro para establecerse allí, las respuestas han sido variadas. La mayoría optó por responder que hay zonas seguras y zonas no tan seguras (34,43%), si bien seguidamente con un 26,23%, la opinión de los encuestados radica en la inestabilidad del Estado de Israel. Sólo un 16,39% considera que el Estado de Israel es completamente seguro con independencia de que haya conflicto o no. Es curioso que en la siguiente pregunta, sobre si el encuestado se establecería en el Estado de Israel, la mayoría respondió con un “No absolutamente” (46,77%), y sólo un 17,74% se establecería allí permanentemente.
A continuación, se procede a la valoración de los conocimientos de Israel. Sobre si el encuestado poseía conocimientos sobre el Estado de Israel, predomina la respuesta de que el mismo tiene bastante conocimiento adquirido (32,73%), seguida de un conocimiento bastante escaso (29,09%), y sólo un 3,64% de los encuestados tenía un nivel profesional/experto sobre la materia.
La siguiente pregunta es bastante definitoria en este análisis, no obstante, puesto que hay límite de extensión, me centraré en las más significativas. Sobre el Mandato Británico (clave en la creación, la situación actual y las relaciones del Estado de Israel), prima un “conocimiento superficial” (47,17%). Prima la “Ignorancia absoluta” sobre la figura de David Ben Gurion (48%). Sobre la Guerra de los 6 días, se iguala tanto el “conocimiento superficial” con un conocimiento más firme si bien no alcanza el nivel experto (31,37% cada opción); un resultado parecido se ha dado con la Guerra del Yom Kipur. En cuanto a la Cumbre de Madrid, prima la “Ignorancia Absoluta” (54%), respuesta también escogida por los encuestados en relación a la figura de Yitzhak Rabin (67,31%). Sobre los Acuerdos de Oslo (clave en la negociación Israel-Palestina), el encuestado (36%) optó por escoger que conocía superficialmente la materia, si bien un 28% de los encuestados mostraban un conocimiento algo más profundo de la materia. Las figuras de Ariel Sharon, Shimon Peres y Benjamin Netanyahu obtuvieron un resultado más o menos parecido, si bien el más desconocida de los tres es Shimon Peres (el 43,41% reconoce tener absoluta ignorancia sobre el mismo).
Finalmente, la encuesta acababa con una pregunta sobre uno de los poderes del estado de Israel. A la pregunta de ¿Qué cree que es la Knéset?, resulta curioso observar que un 66,04% de los encuestados marcó la respuesta correcta, afirmando que es el cuerpo legislativo o Parlamento.
B) Comparación. ¿Qué relación hay entre la No Conformidad absoluta con el Estado de Israel y el conocimiento verdadero sobre el mismo?
Esta encuesta podría dar lugar a interesantes conclusiones, si bien por concretizar, es conveniente centrarse en la relación que existe en aquellos No conformes con la creación y situación del Estado de Israel y el verdadero conocimiento que éstos tengan o no con el mismo. De estos 27 encuestados que respondieron con un “No” rotundo a la pregunta 4, un 45,83% afirma obtener bastante conocimiento adquirido sobre la historia del Estado de Israel.
A pesar de ello, la pregunta definitoria es la 9, y en esta se observa cierta discrepancia con la afirmación anterior. El Mandato Británico es desconocido por el 40,91% de los encuestados, y conocido muy levemente por el 45,45%. Sin entender el Mandato Británico y la situación que hubo antes del 14 de Mayo de 1948 en el territorio que se denominaba entonces enteramente como Palestina, es muy complicado entender la conformación y el devenir histórico reciente del Estado de Israel.
David Ben Gurion, la figura por antonomasia de la creación y proclamación del Estado de Israel el 14 de Mayo de 1948, y convertido en el primer “Primer Ministro” que fue reelegido hasta 1963, es ignorada por un 48% de este grupo de encuestados, y conocido ligeramente por el 30% de los encuestados.
Con la Guerra de los 6 días y la Guerra del Yom Kipur se igualan más los resultados. Se podría decir que la proporción es parecida entre los que ignoran los episodios completamente, los que lo conocen superficialmente, y los que tienen conocimiento adquirido sobre el tema (en torno al 30% cada respuesta). La Cumbre de Madrid de 1991 es bastante desconocida. El 54% de este grupo de encuestados lo ignora completamente. Fue otro episodio clave en la negociación palestino-israelí. No obstante, la figura histórica más desconocida en esta pregunta concreta es la de Yitzhak Rabin (67,31% de los encuestados lo ignoran completamente). El que además de Premio Nobel de la Paz fuera Primer Ministro tras Golda Meir y reelegido tras Shimon Peres y negociador de la paz definitiva con Palestina y con Yasser Arafat, es ignorado por la gran mayoría de los que están disgustados con el Estado de Israel… Cuestión abierta para la reflexión interna. En cambio, sobre los Acuerdos de Oslo (en los que participaron Yitzhak Rabin y Yasser Arafat), los resultados se igualan entre la ignorancia absoluta, el conocimiento superficial, y un conocimiento algo más profundo sobre la cuestión; lo que lleva a plantear también qué parte de la Historia es la que se quiere enseñar o no.
En cuanto a la figura de Ariel Sharon, también los resultados están bastante igualados entre la ignorancia absoluta, el conocimiento superficial y el conocimiento algo más profundo, si bien predomina la ignorancia absoluta con un 35, 29% de los encuestados. Shimon Peres (al que antes se ha mencionado), es desconocido para un 43,14%, otro partícipe activo en la consecución de la Paz con Palestina, y es conocido superficialmente por un 27,45%. Y finalmente, sobre Benjamin Netanyahu, el actual Primer Ministro de Israel, el resultado se iguala entre los encuestados, un 26,92% ignora su figura, el 28,85% lo conoce levemente y el 32,69% tiene un conocimiento mayor sobre su figura. Cabe destacar que el 11,54% de los encuestados reconoce tener un nivel experto en la cuestión. Curiosamente, de este grupo de encuestados, un 66,04% sabe qué es la Knéset (pregunta 10).
C) Conclusión.
Por lo tanto, aunque lo suponía personalmente previsible pero son los datos los que verifican un argumento, una mayoría de aquellas personas a las que NO imperativamente les gusta el Estado de Israel, conocen o ignoran relevantes aspectos sobre el mismo. La campaña de “País de Mierda”[8], realizada en 2008 por un español residente en Israel, desacredita a España provocando furia o incluso vergüenza para el espectador español que conoce de primera mano que la vida en España no es tal y como se muestra; mostrando a continuación imágenes de cómo se ve a Israel y cómo es verdaderamente Israel. Tal y como escribe Matti Friedman en su artículo “El por qué de la animadversión de los medios contra Israel”[9]: “El hecho de que los israelíes habían elegido recientemente gobiernos moderados que buscaban la reconciliación con los palestinos, y que se han comprometido por los palestinos, se considera poco importante y rara vez se menciona. Estas brechas son a menudo no descuidos, sino una cuestión de política. A principios de 2009, por ejemplo, dos de mis colegas habían obtenido información sobre el primer ministro israelí Ehud Olmert y su importante oferta de paz a la Autoridad Palestina, varios meses antes, que los palestinos habían considerado insuficientes. Esto no había sido informado y que era, o debería ser, una de las historias más grandes del año. Los periodistas habían obtenido la confirmación de ambas partes e incluso uno había visto un mapa, pero la oficina de jefe de editores ha decidido no publicar la historia. (…). El informe ofrecido de Olmert fue considerado una tontería. Así que se nos instruyó a ignorarlo, y así se ha hecho durante más de un año y medio. Esta decisión me ha enseñado una lección que debe ser explicado a los consumidores en la historia de Israel: muchas de las personas que deciden lo que lees y ves aquí ven su papel no como un político sino como explicativo. La información es un arma para ser puesto a disposición de la parte que prefiera.”
Este tipo de actuaciones pretenden mostrar realmente lo que el Estado de Israel es, lo que ofrece (a nivel económico, laboral…), y lo envidiable que podría ser su configuración es aspectos concretos. ¿Por qué no quieren mostrarnos cómo es Israel en vivo? Esa es la cuestión.
Aspectos históricos curiosos del Estado de Israel
La Historia del Estado de Israel quizás podría remontarnos a los antiguos textos sagrados, a la Torah, al mismísimo Avram: “YHWH se le apareció a Avram y le dijo; “Yo le asignaré esta tierra a tu linaje”. Y él edificó allí un altar a YHWH que se le había aparecido. Desde allí se trasladó a la serranía al este de Betel y montó su carpa, con Betel al oeste y Ai al este; y edificó allí un altar a YHWH e invocó a YHWH por nombre. Luego Avram viajó por etapas hacia el Néguev.” (Bereshit, 12, 7-9)[10].
No obstante, la Historia más contemporánea sobre el origen y fundamento del Estado de Israel comenzaría al final del siglo XIX, cuando el territorio denominado Palestina era parte del Imperio Turco, y el movimiento Sionista apostaba fuertemente por crear un “hogar para los judíos” en ese territorio que históricamente era la Tierra Prometida, Sion. Empezaron a emigrar judíos a ese territorio, movimiento migratorio que se incrementó ante el ascenso rápido del antisemitismo en Europa. Cuando la I Guerra Mundial finaliza y cae el Imperio Turco, es Gran Bretaña quien por mandato de la ONU recibe la administración de Palestina. A partir del inicio de esta etapa de Mandato Británico, y para concretizar los datos históricos que todos los lectores pueden buscar, es importante tener en cuenta los siguientes aspectos curiosos pero clave en la construcción del Estado de Israel y que ayuda a entender su configuración política actual:
La importancia de los Kibbutzim: antes de que se declare el 14 de Mayo de 1948 la creación del Estado de Israel y su independencia definitiva de los británicos, el kibutz12 cumplía un “rol” nacional.
El primer kibutz fue Degania, fundado por judíos provenientes de Rusia inspirados por el sionismo socialista. De hecho, los primeros movimientos militares y miembros de la Haganah (el ejército clandestino israelí) nacen de los Kibutz (los grandes líderes como David Ben Gurion surgieron de los mismos): “(…) una generación de judíos palestinos había entrado en la organización. (…) la Haganah estaba íntimamente ligada a las estructuras de la comunidad judía a que pertenecía. (…) nunca había hecho distinción entre hombres y mujeres, y había formado su propio movimiento de juventud, la “Gadna” que preparaba a los chicos y chicas (…). Así, cuando las Naciones Unidas partían Palestina, la mayoría de la juventud judía poseía ya algunas nociones rudimentarias de formación militar.”13 Actualmente hay 273 kibutz de los cuales sólo 16 son religiosos
La dependencia o interrelación con Estados Unidos14 se debe principalmente a que Estados Unidos movió cielo y tierra para que la Asamblea de la ONU aceptase la partición de Palestina el 29 de Noviembre de 1947. Es importante conocer que el Lobby judío en Estados Unidos es muy importante sobre todo para el ala Demócrata: “Su máximo representante es AIPAC (American Israeli Public Affairs Committee). El total de los “gastos en lobbying” de grupos pro israelíes en 2008 fue de 3,23 millones de dólares y de esa cantidad, 2,5 millones de dólares procedieron del AIPAC, destaca Moceri. Por lo que responde a la campaña electoral (…) de 2008, los grupos pro israelíes donaron 11 millones a los candidatos.” 15 Según James Levy, “Israel es el país extranjero con más empresas cotizadas en la bolsa de Nueva York.”
Israel se nutre actualmente en gran parte de primeras generaciones de inmigrantes, lo que se refleja directamente en sus dirigentes políticos. Lo que quiere decir es que todavía las esferas políticas no están nutridas totalmente de generaciones auténticas de israelitas nacidos en Israel. Los personajes históricos más reconocidos son inmigrantes en su mayoría, como Golda Meir de origen ucraniano y estadounidense; David Ben Gurion el gran líder de la Independencia, era de origen polaco, como Shimon Peres. También, al igual que Netanyahu, hay miembros de la esfera política que son de origen israelita pero nacidos en la época del Mandato Británico, antes de la partición de Palestina y de la configuración del Estado de Israel. Por lo tanto, los “descendientes directos de la tierra de Israel”, no han alcanzado todavía a ocupar las instituciones en su totalidad; si bien es curioso que este hecho no “perjudica” ni disminuye el sentimiento e interés nacional.
El Sistema político de Israel
Israel se configura en una Democracia parlamentaria, es decir, posee un Presidente o Nasí (que es Reuven Rivlin) y un Primer Ministro (Benjamin Netanyahu hasta las elecciones del Martes 17 de Marzo de 2015, quedando pendiente su elección por la Knéset y la serie de coaliciones que tendrá que realizar para poder gobernar).
Puesto a su creación tan reciente y sus pocos años de duración, Israel es un estado que es nutre mayoritariamente de grupos sociales muy diversos y pluriculturales, hecho que se refleja en la política (se encuentran Partidos políticos que representan a los grupos árabes, a los ultraortodoxos judíos, a los judíos asquenazíes…). Además, es un Estado nutrido en sus bases y orígenes de inmigrantes, y “(…) no se trata solamente de un país desarrollado por inmigrantes, sino de un país aún dirigido por inmigrantes.”[11] Toda esta diversidad étnico-religiosa y social se refleja directamente en sus instituciones políticas.
A) El Nasí o Presidente.
El Presidente, que es el Jefe del Estado, podría corresponder al Presidente de la República de Francia si bien, su papel no es exactamente igual (y su figura se subordina en popularidad al Primer Ministro, puesto que es más representativo el Primer Ministro israelí que el Presidente, exceptuando figuras como la de Ariel Sharon). La figura del Presidente deriva del Sanhedrín, que era el ente “judicial y legislativo supremo del pueblo judío en la Tierra de Israel” en la Antigüedad. De entre los candidatos que se presentan (por méritos propios o ayuda al Estado de Israel), se escogerá al Nasí por mayoría simple de los miembros de la Knéset durante 7 años sin posibilidad de reelección (desde 1998). Sus funciones, comunes a las de los Jefes de Estado, son formales y protocolarias, además de públicas.
B) Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
El Primer Ministro (actualmente, si bien tiene que ser escogido por la Knéset, además de tener que formar Gobierno en coalición al no haber alcanzado la mayoría correspondiente, es Benjamin Netanyahu desde 2009), en realidad es un Primus entre el Gobierno, puesto que es entero en sí el Gabinete de Gobierno el que conforma el poder ejecutivo de Israel. Los ministros responden de las actuaciones de su ministerio ante el Primer Ministro. El Gobierno administra tantos asuntos internos como externos y tiene poderes bastante amplios si bien están limitados por ley (limitados por el mismo poder legislativo). El periodo de legislatura es como en España, 4 años modificables ya sea por disolución de la Knéset por parte del Primer Ministro, o por mecanismos de control de la Knéset al Primer Ministro (moción de censura…). Por lo tanto, se observa que existen elementos de accountability horizontal (entre instituciones o poderes), puesto que el Parlamento controlará al Ejecutivo pero el Ejecutivo podrá también disolver al Parlamento.
El poder ejecutivo de Israel podría ser en líneas generales muy similar a cualquier poder ejecutivo de una democracia parlamentaria, si bien, la nota diferenciadora radica en que todos los gobiernos desde 1948 han sido de coalición al no haber conseguido nunca un partido la mayoría necesaria para formar gobierno solo. Como se ha mencionado repetidamente, el Estado de Israel es pluricultural y formado por grupos étnico-religiosos muy diversos que se reflejan en diferentes partidos políticos. La diversidad política que supone que sean coaliciones las que gobiernen y no sólo un programa político de un partido concreto, se traduce en que no todos los ministros van a ser de un determinado partido político, que la negociación o consenso van a estar siempre presentes y que el control interno dentro del Ejecutivo va a ser mayor. Quizás no sea del todo correcto, pero existe un mecanismo controlador que podría ser perfilado, salvando las distancias, como accountability horizontal (alejada de lo que supone por ejemplo el control entre Ejecutivo y Parlamento), es decir, dentro del Gobierno hay un continuo deseo de consenso y negociación para que perdure la gobernabilidad (exigido por los mismos ciudadanos, que pretenden ser gobernados de manera estable). ¿Cómo se afirma este hecho? Pues que desde 1948 todos los Gobiernos han sido de coalición y a pesar de las diferencias político-religiosas de los diferentes grupos políticos que ocupen determinadas carteras, suele existir un interés nacional primario en los asuntos de gobierno, “Una coalición heterogénea de cara al exterior y homogénea en los asuntos internos que parecen ser su prioridad. (…)”[12].
Tal y como se adelantaba, el Poder Legislativo está en manos de la Knéset o Parlamento. Formada por 120 diputados, su denominación también se debe a motivos históricos (Knéset Haguedolah, el Consejo judío también formado por 120 miembros) si bien son totalmente diferentes. Su mandato coincide con el del Ejecutivo, 4 años, si bien pueden ser disueltos antes por el mismo, tal y como se ha observado anteriormente. Principalmente, su función es la legislativa, e inclusive el trabajo se divide en Pleno y 15 Comisiones Permanentes (muy similares a lo que podría ser nuestro sistema Parlamentario). No obstante, en el proceso legislativo en el que no deseo entrometerme puesto que tampoco es necesario, hay una fase curiosa en el debate plenario final en el que en vez de debatir sobre todo el texto, se aprobará artículo a artículo el proyecto de ley.
En relación a las Elecciones Generales (que incumben a Parlamento y Ejecutivo), hay que considerar que Israel es una única circunscripción electoral (hay que considerar también su tamaño reducido). Se vota a una lista de partido y no a un candidato concreto. ¿Por qué detenerme en las Elecciones? Porque es un rasgo muy significativo del sistema político. Entre un 70%-90% de los ciudadanos acuden a votar a las elecciones, y no sólo eso, el Estado fomenta que los ciudadanos acudan a votar a las mismas (lo que implica una mayor cultura política y un deseo de participación en la política): “El día de las elecciones es feriado. Los electores que ese día se encuentran alejados de su lugar de residencia habitual pueden utilizar gratuitamente los transportes públicos para ir a votar. Militares, pacientes hospitalizados y reclusos, votan en urnas especiales instaladas al efecto, al igual que los marineros en alta mar y los diplomáticos israelíes en el extranjero.”[13] Si el ciudadano está involucrado en la política de su Estado, el control (accountability vertical) de los ciudadanos hacia su sistema de Gobierno va a ser mayor, y es más probable que esos inputs, las demandas se transformen en outputs, siendo el proceso de feedback más dinámico.
En Israel no hay constitución escrita, y puede ser que sea influencia del Mandato Británico y del sistema anglosajón. Por lo tanto, el poder judicial juega un papel importantísimo en la aplicación e interpretación de las leyes. Su sistema judicial grosso modo, se divide en Tribunales Generales (con tres niveles de cortes encabezados por la Corte Suprema) y Tribunales u otros órganos (juzgados) con atribuciones judiciales con competencias más limitadas. Puesto que entrometerse en el análisis exhaustivo del poder judicial de Israel no es el objetivo final del actual ensayo, es cierto que hay rasgos curiosos a destacar que lo diferencian de otras democracias. En primer lugar, existen los Tribunales religiosos20: “El sistema legal israelí es único entre los sistemas legales modernos en la utilización de varias leyes sobre el status personal en el área de la ley familiar, que son atendidas por las cortes religiosas. Este fenómeno tiene raíces históricas y políticas: existía bajo el dominio otomano y fue conservado por los británicos luego de que conquistaran el país. La fuente básica para la aplicación de la ley sobre el status personal y la jurisdicción de los diferentes tribunales religiosos se encuentra en la Orden Palestina en Consejo (1922). Esta orden estipula que "la jurisdicción en asuntos sobre status personal será ejercida... por los tribunales de las comunidades religiosas". (…) La Orden Palestina en Consejo reconoció once comunidades religiosas: judíos, musulmanes, y nueve denominaciones cristianas. El gobierno israelí agregó a esta lista la Iglesia Evangélica Presbiteriana y los Bahai. La Knéset también puso en efecto la ley que otorga jurisdicción a los tribunales religiosos drusos.”. Curioso, ¿no? Es curioso porque generalmente se asocia el laicismo radical a la mayor objetividad, estabilidad y permanencia de una democracia, pero el Estado de Israel permite que las comunidades religiosas tengan una alta participación en las instituciones.
En segundo lugar, hay que tener en cuenta que el poder judicial es independiente y con una alta participación en la interpretación y aplicación de la ley y cuyo nombramiento no es interferido por los otros poderes (por ejemplo, en España se critica la injerencia del Parlamento que existe en la designación de los miembros del Consejo General del Poder Judicial): “(…) son seleccionados por la Comisión de Selección Judicial, que está compuesta por nueve miembros: el Ministro de Justicia (presidente), otro ministro del gabinete, el Presidente de la Corte Suprema, otros dos jueces de la Corte Suprema, dos miembros de la Knéset y dos representantes del Colegio de Abogados de Israel. Las tres ramas de gobierno (…) están representados en la comisión. La mayoría de los miembros de la comisión son abogados de profesión: los tres jueces de la Corte Suprema y los dos representantes de la profesión legal.”[14]
Conclusión.
Puesto que la extensión es limitada y mi curiosidad es desbordante, ceñirse a ciertos aspectos concretos y seleccionar un análisis más exhaustivo, ha sido un trabajo más laborioso del que esperaba, y desdeñar ciertos capítulos que hubiera deseado analizar fervorosamente no ha sido sencillo. No obstante, grosso modo o en líneas generales, analizar el Estado de Israel ha producido en mí el efecto que espero que produzca en el lector: más ansia por conocerlo, desmembrarlo, investigarlo y admirarlo (y por qué no, volver a visitarlo).
Mi particular obsesión por Israel y mi poca objetividad a la hora de tratar el tema hizo que decidir investigar en serio sobre el mismo e intentar demostrar por qué es un Estado fuerte, estable e incluso envidiable en ciertos aspectos; haya hecho que aprenda ciertos aspectos indispensables a la hora de defender con fortaleza y seguridad la buena gobernanza, el buen funcionamiento y la estabilidad indispensable en la buena democracia del Estado de Israel.
Como experiencia personal, yo observé directamente el pluriculturalismo y la diversidad étnicoreligiosa que existe en Israel, la división de la ciudad antigua de Jerusalem en cuatro barrios en los que residía una distinta “cultura”; el ruido del shofar, la llamada del Iman y las campanas de la Iglesia del Santo Sepulcro; cómo en Shabat se paraliza toda Jerusalem, cómo el viernes no se puede visitar la Mezquita de la Cúpula Dorada y las misas de la Iglesia donde supuestamente está enterrado Jesús de Nazaret… No obstante, Tel Aviv, Haiffa, Eilat son otro tipo de ciudades, pero la modernidad no deja atrás a las raíces histórico-culturales que han nutrido la historia del territorio de Israel.
A pesar de ello, el crecimiento que ha experimentado desde 1948 ha sido rápido y ascendiente (exceptuando periodos de crisis como en la década de 1980 o inclusive la global de estos años). Alrededor suyo, el PIB per cápita (2013) es en Palestina de 2.783 US$, Jordania 5.242 US$, Siria 3.289 US$ y Líbano 9.928 US$. En el Índice de Desarrollo Humano, los países limítrofes a Israel poseen los siguientes puestos en el ranking: Jordania en el 77º, Siria en el 118º y Líbano en el 65º… Comparar datos y Estados limítrofes sería digno de otro estudio exhaustivo pero en esta ocasión no hay espacio[15].
¿Por qué un Estado tan supuestamente beligerante ad extra es tan estable ad intra? La pregunta para mí es si el Estado es en realidad tan beligerante o se muestra la beligerancia que se desea. No obstante, respondiendo al por qué de su buen funcionamiento ad intra, se podría afirmar tal y como se ha visto en el análisis del sistema político concretamente que existen mecanismos de control entre instituciones y de control de los ciudadanos a las instituciones que crean el equilibrio. Bien por legado británico o por influencia estadounidense, las instituciones del Estado de Israel tienen la posibilidad de controlarse entre sí y los ciudadanos tienen la capacidad de controlar sus instituciones puesto que se fomenta la participación del ciudadano en las elecciones y en la vida política. La Knéset controla al Ejecutivo, y el Ejecutivo puede controlar a la Knéset, el poder judicial tiene independencia del Ejecutivo y del Legislativo, y la no existencia de una constitución escrita, hacen que el poder judicial pueda tener más margen de actuación a la hora de resolver los conflictos pertinentes.
Pero lo más concluyente y lo más determinante es el fomento, el apoyo y la permanencia del legado histórico-cultural y religioso del Estado de Israel. No hay una anulación de la tradición, se fomenta, se protege y permanece. Es el único estado de Oriente Medio que aprobó las uniones de hecho entre homosexuales equiparables al matrimonio y reconoce los matrimonios homosexuales que se realizaron en terceros estados; con un importante lobby gay reconocido en el ambiente a nivel internacional (ARISA Tel Aviv, Eliad Cohen, Uriel Yekhutiel…). A la par, reconoce los Tribunales religiosos e implanta el servicio militar obligatorio23 de dos años para mujeres y tres años para hombres.
¿Es más democracia una democracia laica y atea? No tiene por qué. ¿Es más estable un gobierno de un único partido? 67 años de Historia del Estado de Israel han demostrado que no. ¿Qué es lo que hace que funcione? No dejar al lado la tradición ni los orígenes, ni el respeto por la diversidad cultural y sobre todo, amar al Estado de Israel, quererlo, cuidarlo y formar parte de él.
“Si alguna vez te olvidase, Jerusalén, Que me falle la diestra;
Se me pegue la lengua al paladar Si no te recuerdo,
Por encima de mi alegre canción.”
Canto de los hijos exiliados de Israel. Salmo 137
[1] “Bereshit” es el correspondiente al Génesis, “Shemot” es el Éxodo, “Teré Asar” son los Doce Libros de Profetas. IEHUDA LEVÍ, Rav; “Lal Torá y el Tanaj”. http://www.judaismohoy.com/article.php?article_id=1068
[2] “Israel, en Datos”, ABC AGENCIAS http://www.abc.es/internacional/20150317/abci-israel-elecciones-datos201503130935.html
[3] Fuente: http://www.datosmacro.com/
[4] Estados participan en este ranking, cuanto más cercano se esté al puesto 1, más trasparente es el Estado. 5 189 Estados participan en este ranking, cuanto más cercano se esté al puesto 1, más facilidades ofrece el Estado para establecer un negocio.
[5] Elaborado por la ONU, 178 Estados participan en este ranking, cuanto más cercano se esté al puesto 1, mayor índice de desarrollo humano posee el Estado.
[6] Debido al límite de extensión de este ensayo, las gráficas e imágenes de la encuesta se adjuntan como anexo extra para que el profesor observe su veracidad.
[7] Vista previa de la encuesta:
https://es.surveymonkey.com/s.aspx?PREVIEW_MODE=DO_NOT_USE_THIS_LINK_FOR_COLLECTION&sm=CPiWw0EvZ837nZ5kI6 S5nGVEDbUAPYAVkC4Zzxac_2FRc_3D
[8] http://www.paisdemierda.org/
[9] FRIEDMAN, M. “El Por qué de la animadversión de los medios contra Israel”, http://www.estadodeisrael.com/2014/08/el-porque-de-la-animadversion-de-los.html
[10] AHARONI, Yosef (Revisión y traducción); “Las Sagradas Escrituras” versión israelita-nazarena. Editorial Hebraica, Puerto Rico. 12 Según la Enciclopedia Judaica: “Asentamiento colectivo israelí, usualmente agrícola y a menudo también industrial, regido por principios socialistas de organización. (…) se comparte la posesión además de la propiedad, y el resultado de la actividad productiva
[11] HADAS, Samuel: “Israel Hoy”, Conferencia Universidad de Navarra Septiembre 2008; Centro Social de Estudios de Oriente Medio, Fundación Promoción Social de la Cultura. http://www.fundacionfpsc.org/comun/imagenes/File/CEMO/ARTICULOS%20DE%20EXPERTOS/ISRAEL%20HOY%20bonito%202.p df
[12] EMERGUI, Sal; “Así es el Gobierno número 33 de Israel”, El Mundo Online, Jerusalén 2013
http://www.elmundo.es/elmundo/2013/03/17/internacional/1363517911.html
[13] http://mfa.gov.il/MFA/MFAES/Facts%20About%20Israel/ESTADO/Pages/EL%20ESTADO-%20Elecciones.aspx 20 http://www.deisrael.com/contentid-58.html
[14] http://www.mfa.gov.il/mfa/mfaes/facts%20about%20israel/pages/el%20sistema%20judicial.aspx
[15] http://www.datosmacro.com/paises/comparar/israel/ 23 http://www.idfblog.com/
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